El mostoleño Fran Garrigós inaugura el medallero español en París con un bronce en judo
Fran Garrigós pasó a la historia del judo español rompiendo la larga sequía olímpica con una medalla de bronce en -60 kg en los Juegos Olímpicos París 2024. El judoca mostoleño derrotó en la repesca al actual campeón del mundo, Giorgi Sardalashvili, con un waza-ari en la técnica de oro.
Es la primera medalla olímpica para el judo español desde el oro de Isabel Fernández en Sídney 2000. Desde entonces, una larga sequía de 24 años, pese a que durante este tiempo el judo español siguió sumando éxitos en Campeonatos del Mundo, Europeos y Grand Slam. Y una racha aún más persistente en categoría masculina, donde para encontrar la última medalla había que remontarse a la plata de Ernesto Pérez en Atlanta 1996.
Una presión que, sin embargo, no sintió esta vez. «La presión la sentimos sobre todo en Tokio 2020, porque en el Mundial anterior habíamos conseguido cuatro años medallas para España», confesó en rueda de prensa. «Pero en estos Juegos he salido sin presión, pensando solo en lo que dependía de mí y disfrutando del tatami».
🤩 EL MOMENTO 🤩
🥉 Así fue como llegó el BRONCE de @FranGarrigos1 en #Paris2024
📹 @Eurosport_ES#ElCorazónDeEspaña❤️🇪🇸 pic.twitter.com/bzdSejDDsh
— Comité Olímpico Español (@COE_es) July 27, 2024
Qué mejor manera para sacar la espina de haber perdido en el primer combate en sus dos anteriores Juegos Olímpicos. La primera, en Río 2016, pudo digerirla al ser todavía demasiado joven. Pero la de Tokio 2020, donde esperaba meterse en la lucha por las medallas, hizo tanto daño que incluso llegó a pensar en dejar este deporte.
Garrigós revivió en las manos de Quino Ruiz, el gurú del judo español (cinco de los nueve olímpicos españoles entrenan con él). Entendió que la fortaleza mental era tan importante como la física o la técnica, y firmó un ciclo olímpico de ensueño que ahora corona con esta histórica medalla de bronce.
El mostoleño se proclamó campeón del mundo en 2023 (un torneo donde también se cruzó con Sardalashvili), uniendo su nombre a una lista exclusiva donde solo estaban las campeonas olímpicas Miriam Blasco (1991) e Isabel Fernández (1997), y su compañero y gran amigo Niko Shera (2018, 2021). El pasado mes de mayo perdió esa corona, de nuevo cayendo por sorpresa en el primer combate en la que era su última cita antes de los Juegos Olímpicos. Un título que acabó en manos de Sardalashvili. Un tropiezo que no le sacó del camino.
