Móstoles expedienta a responsables de demolición por daños al patrimonio histórico
El Ayuntamiento ha abierto varios expedientes disciplinarios sancionadores contra los responsables de una demolición en el casco urbano por presuntas infracciones graves contra el patrimonio histórico. Según han denunciado asociaciones locales y formaciones de la oposición, las obras en cuestión afectaron tanto a estructuras arquitectónicas antiguas como a varios árboles protegidos.
Los hechos fueron denunciados recientemente por la asociación Amigos de la Historia de Móstoles (AHIMOS), que alertó de que, durante la demolición de unas casas bajas situadas en las calles Ricardo Medem y América, descubrieron a operarios extrayendo tinajas históricas de una cueva presuntamente protegida. AHIMOS, en un comunicado, señaló que uno de los edificios demolidos incluía “una magnífica bodega con más de una docena de tinajas, pajar, palomar y otros elementos tradicionales de la arquitectura agraria de Móstoles” y aseguraron que su estado “no era, en absoluto, ruinoso”.
Ante esta situación, la oposición en el Ayuntamiento, formada por PSOE y Más Madrid, ha solicitado al gobierno local, de coalición entre PP y Vox, tomar medidas para «reparar el daño causado en el patrimonio histórico, cultural y etnográfico» de la ciudad. Según explicó el concejal de Urbanismo, Vivienda, Patrimonio y Mantenimiento de la Ciudad, Sergio Soler (PP), durante el pleno municipal, los responsables de la demolición ya enfrentan un expediente sancionador, con una multa de “más de 30.000 euros” por «haber comenzado las excavaciones con maquinaria pesada sin la licencia adecuada». Soler precisó que las autorizaciones iniciales no incluían el uso de una excavadora, y que los promotores del proyecto “no podían excavar de la cota cero hacia abajo”, ya que dicha intervención requería de una licencia específica, aún en trámite y no concedida.
El edil añadió que el Ayuntamiento tomó “rápidas medidas”, paralizando la obra en “menos de 24 horas” y abrió otro expediente sancionador porque los promotores no cumplieron con la protección de los árboles en la parcela. La falta de precauciones durante las obras ha supuesto la tala de al menos 20 ejemplares, lo que podría implicar una sanción adicional de hasta 300.000 euros.
Soler subrayó que el Ayuntamiento evaluará la normativa en torno a la “declaración responsable” para intervenciones en inmuebles de valor histórico y se mostró abierto a revisar los mecanismos de protección del patrimonio local.