El enlace de la R-5 con Móstoles Sur vuelve a retrasarse por un nuevo requerimiento técnico

El inicio de las obras del esperado acceso entre la R-5 y el barrio de Móstoles Sur (PAU-4) no comenzará, de momento. Aunque el proyecto cuenta con presupuesto para ejecutarse este año, la Dirección General de Carreteras ha solicitado un nuevo estudio geotécnico, lo que ha provocado un nuevo aplazamiento.

El enlace fue planteado en 2014 por el Consorcio Móstoles Sur, un ente participado a partes iguales por el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid. El objetivo era habilitar una conexión en el kilómetro 11.500 de la R-5, mediante un paso elevado y cuatro ramales que conectaran con los accesos a la M-50 y la M-506, sin coste para los conductores.

Aunque inicialmente se presentó como una actuación de corto plazo, el proceso se ha prolongado durante más de una década. Tras rehacerse el estudio de tráfico por exigencia del Ministerio de Transportes, la autorización definitiva llegó en 2021, permitiendo avanzar hacia la licitación del proyecto.

A finales de 2024, durante la presentación de los presupuestos municipales para 2025, se indicó que las obras se iniciarían este año. Entonces, el concejal de Hacienda, Presidencia y Recursos Humanos, Alberto Rodríguez de Rivera, afirmó que ya estaban aprobadas «todas las autorizaciones necesarias» y que el inicio de los trabajos era inminente. «Ya se ha hecho el proyecto, ha salido la licitación y tras la adjudicación se iniciarán las obras», declaró.

No obstante, ese calendario se ha visto alterado. Según explicó el concejal de Urbanismo, Vivienda, Patrimonio y Mantenimiento de la Ciudad, Sergio Soler, la Dirección General de Carreteras ha exigido recientemente un nuevo estudio del terreno. «Nos dijeron que iban a comunicarnos el OK en primavera, pero en primavera se sacaron de la manga que había que hacer urgentemente un estudio geotécnico», señaló. El estudio ya se ha realizado y remitido nuevamente al organismo competente.

Desde el Consistorio aseguran que todo está preparado para comenzar tan pronto como llegue el visto bueno definitivo. «La cuantía está dotada, estamos deseando que nos den permiso para empezar a hacer la actuación», indicó Soler. También apuntó que el nuevo requerimiento no depende del Ayuntamiento ni del propio Consorcio, y que la previsión sigue siendo iniciar la obra este mismo año. «La obra dura varios meses, más de un año», añadió.

Una vez ejecutado, el nuevo acceso servirá para descongestionar algunas de las vías más transitadas en los desplazamientos hacia la M-50 y la M-506. Según los datos técnicos disponibles, se estima que circularán por este nuevo ramal unos 10.000 vehículos diarios. Esto supondría un descenso de aproximadamente 3.500 vehículos diarios en el actual enlace con la M-506 de Leganés, y unos 4.700 menos en el acceso de Simón Hernández.

También se prevé una reducción más moderada del tráfico en la Avenida de Portugal, con cerca de 1.300 vehículos menos al día, así como una mejora en las conexiones por el norte hacia la autovía A-5 y la propia M-50. El objetivo es aliviar la presión de tráfico que sufre actualmente el barrio del PAU-4 en las horas punta.

Desde el Ayuntamiento insisten en que el proyecto sigue adelante y que el retraso responde únicamente a exigencias técnicas. Si no se produce un nuevo requerimiento, la licitación y adjudicación del contrato podrían completarse en las próximas semanas.