Los vecinos reclaman que los autobuses interurbanos vuelvan a llegar hasta Príncipe Pío

Vecinos de Móstoles han reiterado esta semana su demanda al Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) para que los autobuses interurbanos retomen su recorrido habitual hasta el intercambiador de Príncipe Pío. Según han señalado, la actual situación del servicio genera “gravísimos perjuicios” a los usuarios del municipio, especialmente desde que los autobuses comenzaron a finalizar su trayecto en Cuatro Vientos con motivo de las obras de soterramiento de la A-5.

La petición, encabezada por la Asociación de Vecinos del Soto de Móstoles, ha cobrado fuerza tras los efectos del apagón eléctrico ocurrido hace unas semanas, que, según la entidad vecinal, “volvió a dejar en evidencia” la necesidad de recuperar el antiguo trazado de las líneas interurbanas con final en Príncipe Pío. Para los residentes, la solución actual no responde a las necesidades de movilidad del suroeste metropolitano.

A pesar de que tanto el Ayuntamiento de Madrid como la Consejería de Transportes e Infraestructuras han defendido públicamente que el plan de movilidad asociado a las obras “está funcionando”, numerosos vecinos de Móstoles y de otros municipios cercanos aseguran que el sistema ha empeorado. En este sentido, desde la Asociación de Vecinos del Soto han criticado que las líneas finalicen en Cuatro Vientos, lo que, según afirman, ha supuesto un retroceso en el servicio de transporte.

“No podemos entender ni aceptar el grave retroceso que hemos dado en la calidad de nuestro transporte público. Nos parece un verdadero despropósito, una verdadera vergüenza, que todas las líneas de autobuses finalicen en Cuatro Vientos, esto es volver a tiempos pretéritos”, ha manifestado Ricardo Zamora, presidente de la asociación.

Además de la restitución del trayecto hasta Príncipe Pío, los vecinos también reclaman una mejora en la frecuencia de paso de la Línea 524, una de las más utilizadas por los mostoleños. Según denuncian, esta línea vio reducido su servicio en septiembre del año pasado, al pasar de una frecuencia de 20 minutos a 30 minutos, lo que ha generado quejas entre los usuarios habituales.

Por otro lado, la entidad vecinal ha solicitado también la creación de una nueva parada en la Línea 526, que estaría situada entre el centro de mayores y la residencia del barrio de El Soto. Según han explicado, esta nueva parada permitiría mejorar la accesibilidad de las personas mayores y evitaría desplazamientos largos hasta las paradas actuales, las cuales consideran poco accesibles y alejadas de ambos centros.

Esta propuesta figura entre las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento al CRTM en el marco de la revisión del nuevo mapa concesional de autobuses, aunque por el momento no se ha informado de avances al respecto. Mientras tanto, las asociaciones vecinales insisten en que se actúe para evitar que esta situación se prolongue.