3 años de prisión para el hombre que incendió la puerta de sus vecinos en Móstoles
El juicio celebrado este martes 22 de abril en la Audiencia Provincial de Madrid ha concluido con una condena de tres años de prisión y 500 euros de multa para el hombre que provocó un incendio en la vivienda de sus vecinos en un edificio de la localidad. El acusado, de 59 años, reconoció los hechos y alcanzó un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular que rebaja considerablemente la pena que inicialmente se le solicitaba: 13 años y dos meses de prisión.
El incidente se remonta al 17 de junio de 2023. Aquella noche, el procesado adquirió gasolina en una estación de servicio del municipio, la introdujo en una garrafa y se dirigió al edificio donde residía. Ya en la tercera planta, roció con el líquido inflamable la puerta y el felpudo de uno de los pisos, al parecer con el objetivo de protestar por los ruidos que atribuía a sus vecinos, una queja que ya había expresado anteriormente. Acto seguido, prendió fuego al acceso de la vivienda, en cuyo interior se encontraba un matrimonio con dos menores de cinco años y diez meses.
El incendio, que no llegó a propagarse más allá de la puerta gracias a la rápida intervención de los servicios de emergencia, generó una densa humareda que causó lesiones leves por inhalación tanto a los ocupantes del piso como a varios agentes de la Policía Local y Nacional que participaron en el operativo. Dos dotaciones de bomberos también se desplazaron al lugar para sofocar el fuego.
El tribunal ha tenido en cuenta varias circunstancias atenuantes a la hora de fijar la condena. Entre ellas, figura una alteración psicológica que afecta parcialmente a las capacidades cognitivas del acusado. Según la Fiscalía, el hombre sufre un deterioro cognitivo leve asociado probablemente a una leucoencefalopatía multifocal progresiva, lo que podría haber mermado su capacidad para comprender la gravedad del acto. A esto se suma una atenuante por reparación del daño, ya que los afectados han sido indemnizados por las aseguradoras por los perjuicios físicos y materiales derivados del suceso.
Tras admitir su responsabilidad, se le aplicó una reducción de pena fijada en tres años de prisión por un delito de incendio en concurso ideal con siete delitos leves de lesiones, y una multa de 500 euros.
El caso ha generado inquietud en la comunidad vecinal, tanto por la gravedad del acto como por el hecho de que se produjera dentro de un entorno residencial. La actuación de los servicios de emergencia evitó que el fuego se extendiera al resto del edificio, donde en ese momento residían otras familias.
El acusado se encontraba en libertad hasta la celebración del juicio, y está previsto que en los próximos días se determine su ingreso en prisión para cumplir la pena impuesta.